Cupcakes De Leche Condensada
Estamos un poco pesaditas con los cupcakes, pero de momento os puedo asegurar que no hemos aumentado de peso... jajaja.
Estos pastelillos iban de acompañamiento junto con los Cupcakes de Confetti y os garantizo que gustaron más los "verdes" que los "blancos"... aunque la decisión fue muy complicada.
A los que no seáis muy golosos el nombre os puede parecer ya muy empalagoso.... pero no es así!!!
Hacedlos y me contáis..... De acuerdo??
Es una receta de Alma Obregón, pero con alguna modificación. Ya sabéis que para esto de los cupcakes es nuestro libro de cabecera.
Ingredientes:
- 60 ml. de aceite de oliva
- 160 gr. de azúcar moreno
- 1 huevo
- 2 cucharadas de chocolate blanco en polvo
- colorante (al gusto)
- 1 cucharadita y media de extracto de vainilla
- 125 ml. de leche
- 1 cucharadita de zumo de limón
- 150 gr. de harina
- 1/2 cucharadita de bicarbonato
- 1/2 cucharadita de vinagre
- 125 gr. de mantequilla en pomada
- 125 gr. de queso de untar
- 2 cucharadas de leche (opcional)
Preparación:
Precalentamos el horno a 170º.
Colocamos los papelillos en los moldes de cupcakes.
Hacemos una buttermilk. Para ello ponemos la leche en un vaso junto con el zumo de limón y dejamos reposar unos 10 minutos.
Batimos el azúcar con el aceite hasta conseguir que se integren.
Añadimos el huevo y el extracto de vainilla sin dejar de batir.
Por otro lado, tamizamos la harina con el chocolate blanco y le añadimos la mitad, batiendo a velocidad baja.
Añadimos la buttermilk y el resto de la harina, sin dejar de batir.
En un vasito mezclamos el vinagre y el bicarbonato y cuando haga burbujas se lo añadimos.
Cuando consigamos que la mezcla sea totalmente homogénea, le echamos el colorante que nos guste. Hay que tener en cuenta que como no partimos de una mezcla blanca (hemos usado azúcar moreno), el color nunca va a ser el que tengamos en mente.
Rellenamos los papelillos 2/3 de su capacidad, ayudándonos de una cuchara de formar helados y horneamos durante 20 minutos.
Dejamos enfriar.
Les hacemos un agujero en el centro, sin llegar hasta el final, ayudándonos de un descorazonador de manzanas.
Lo rellenamos con un chorrito de leche condensada y volvemos a poner la tapita.
Hacemos la cobertura.
Para ello tamizamos el azúcar y lo batimos con la mantequilla hasta que se integre.
Si vemos que queda muy espeso, añadimos la leche.
Cuando consigamos una mezcla suave y esponjosa le añadimos el queso que ha de estar muy frío.
Batimos hasta que todo este homogéneo.
Con ayuda de una espátula cubrimos los cupcakes para quitar imperfecciones.
Lo metemos en una manga pastelera y decoramos al gusto.
Nosotras le añadimos un poco de purpurina comestible.
Estos pastelillos iban de acompañamiento junto con los Cupcakes de Confetti y os garantizo que gustaron más los "verdes" que los "blancos"... aunque la decisión fue muy complicada.
A los que no seáis muy golosos el nombre os puede parecer ya muy empalagoso.... pero no es así!!!
Hacedlos y me contáis..... De acuerdo??
Es una receta de Alma Obregón, pero con alguna modificación. Ya sabéis que para esto de los cupcakes es nuestro libro de cabecera.
Ingredientes:
- 60 ml. de aceite de oliva
- 160 gr. de azúcar moreno
- 1 huevo
- 2 cucharadas de chocolate blanco en polvo
- colorante (al gusto)
- 1 cucharadita y media de extracto de vainilla
- 125 ml. de leche
- 1 cucharadita de zumo de limón
- 150 gr. de harina
- 1/2 cucharadita de bicarbonato
- 1/2 cucharadita de vinagre
- Relleno:
- Cobertura:
- 125 gr. de mantequilla en pomada
- 125 gr. de queso de untar
- 2 cucharadas de leche (opcional)
Preparación:
Precalentamos el horno a 170º.
Colocamos los papelillos en los moldes de cupcakes.
Hacemos una buttermilk. Para ello ponemos la leche en un vaso junto con el zumo de limón y dejamos reposar unos 10 minutos.
Batimos el azúcar con el aceite hasta conseguir que se integren.
Añadimos el huevo y el extracto de vainilla sin dejar de batir.
Por otro lado, tamizamos la harina con el chocolate blanco y le añadimos la mitad, batiendo a velocidad baja.
Añadimos la buttermilk y el resto de la harina, sin dejar de batir.
En un vasito mezclamos el vinagre y el bicarbonato y cuando haga burbujas se lo añadimos.
Cuando consigamos que la mezcla sea totalmente homogénea, le echamos el colorante que nos guste. Hay que tener en cuenta que como no partimos de una mezcla blanca (hemos usado azúcar moreno), el color nunca va a ser el que tengamos en mente.
Rellenamos los papelillos 2/3 de su capacidad, ayudándonos de una cuchara de formar helados y horneamos durante 20 minutos.
Dejamos enfriar.
Les hacemos un agujero en el centro, sin llegar hasta el final, ayudándonos de un descorazonador de manzanas.
Lo rellenamos con un chorrito de leche condensada y volvemos a poner la tapita.
Hacemos la cobertura.
Para ello tamizamos el azúcar y lo batimos con la mantequilla hasta que se integre.
Si vemos que queda muy espeso, añadimos la leche.
Cuando consigamos una mezcla suave y esponjosa le añadimos el queso que ha de estar muy frío.
Batimos hasta que todo este homogéneo.
Con ayuda de una espátula cubrimos los cupcakes para quitar imperfecciones.
Lo metemos en una manga pastelera y decoramos al gusto.
Nosotras le añadimos un poco de purpurina comestible.
