Calamares A La Romana
¡¡¡ Hola a todos de nuevo !!!
Espero que, los que hayáis disfrutado de las vacaciones, volváis con las pilas bien cargadas; y los que todavía estéis en ello, las aprovechéis al máximo.
Yo desde luego, lo he intentado y creo que lo he conseguido.
Como siempre ocurre cuando se terminan las vacaciones, traemos un montón de nuevos propósitos para poner en práctica como buscar algo más de tiempo para ti, perder esos kilitos de más que nos hemos traido, ponernos a estudiar esto y aquello, buscar un hueco para leerme el libro que me he dejado a medias,etc.....
Al final, no se que pasa que empezamos con fuerza, pero según van pasando los días se no va olvidando todo.
Yo voy a empezar bien... jejejeje... y de momento, voy a intentar ponerme unos días fijos para publicar mis entradas.
Creo que eso se llama "organización"...jejejeje....
Asi que voy a intentar publicar los lunes y los jueves.
De esa manera tengo una obligación y no se pasarán las semanas sin encontrar un hueco para contaros algo.
Empecemos....
Como los calores siguen entre nosotros y la pereza se adueña de nuestras vidas (por lo menos de la mía), os traigo un aperitivo muy fácil de hacer:
Los calamares a la romana.
Por lo que he visto por ahí, hay muchas formas de hacerlos. Me refiero a los ingredientes que se pueden usar: huevo, levadura e incluso ralladura de limón.
Yo los hago como me enseñó mi madre, pasándolos solo por harina y listo.
De verdad que están muy ricos y siendo de buena calidad, no necesitan nada más.
Ingredientes:
- 500 gr. de anillas de calamar
- 100 gr. de harina
- sal
- aceite de oliva
Preparación:
Lavamos bien las anillas de calamar y las secamos con ayuda de papel de cocina.
Las sazonamos.
Ponemos la harina en un recipiente y vamos pasando por ella las anillas.
Sacudimos para quitar el exceso de harina y reservamos en otro plato.
Ponemos una sartén no muy grande con abundante aceite y cuando esté caliente (pero que no eche humo), vamos friendo las anillas, en pequeñas tandas, es decir, de pocas en pocas.
Freímos unos minutos por cada lado, hasta que se doren.
Sacamos y dejamos escurrir en un plato con papel de cocina para quitarles el exceso de grasa.
Acompañamos con una rodaja de limón.
