Cupcakes De Queso De Cabra Y Cebolla Caramelizada
Seguimos probando recetas para poner en nuestra mesa de Navidad.
En esta ocasión, aprovechando el cumpleaños de mi hermano que no le gusta nada, nada el dulce, le hicimos estos cupcakes salados.
Al principio la idea no me cuadraba mucho. Pensar que te comes una magdalena y que el sabor va a ser salado, es como que mi cabeza no lo entiende. Pero no me han disgustado absolutamente nada. Es verdad que el queso de cabra en casa nos gusta un mucho, por lo que ya teníamos un punto a nuestro favor.
La receta la encontré en CanalCocina.
Probadlos en estas fiestas y dejad a los vuestros alucinados con unas magdalenas saladas..... la pinta es buena y el olorcito que quedó en la cocina, para perder el "sentio".
Ingredientes:
- 220 ml. de aceite de oliva
- 3 huevos
- 210 gr. de harina
- 100 gr. de azúcar
- 1 pizca de sal
- 60 ml. de leche
- media cebolla
- 1 rulo de queso de cabra
- 1 sobre de levadura
Preparación:
Mezclamos los huevos con el azúcar y batimos bien hasta que consigamos que la mezcla nos suba de volumen y blanqueé.
Añadimos el aceite y la leche despacio y sin dejar de batir.
Tamizamos la harina, la sal y la levadura.
Se la vamos añadiendo a la mezcla, cucharada a cucharada, hasta que consigamos que quede homogénea.
Guardamos la mezcla en el frigorífico, tapada con un trapo limpio, durante una hora aproximadamente.
Pasado este tiempo, ponemos a calentar el horno a 180º.
Mientras tanto, partimos la mitad de la cebolla en juliana.
La ponemos en una sarten con una cucharada de aceite a pochar lentamente, removiendo de vez en cuando. De esta manera iremos haciendo que los azúcares de la cebolla se vayan soltando y la caramelizaremos. Nos debe de quedar de color dorado, no hay que dejar que se tueste. Si vemos que nos quedamos sin aceite y se nos va a quemar, echamos un poco de agua y dejamos que se consuma. Escurrimos de grasa y reservamos.
Ponemos los papeles de cupcakes en el molde.
Sacamos la masa del frigorífico y la batimos unos segundos.
Partimos el rulo de cabra en aros.
Echamos un poco de masa en cada papelillo, le añadimos un aro de queso de cabra, un poco de cebolla caramelizada y volvemos a añadir otro poco de masa (sin rebasar los 3/4 de capacidad porque si no se nos sale cuando empiece a subir).
Partimos el resto de la cebolla en daditos muy finos y pequeños para que se hagan enseguida, y decoramos con ello los cupcakes.
Horneamos durante 25 - 30 minutos o hasta que estén doraditos.
En esta ocasión, aprovechando el cumpleaños de mi hermano que no le gusta nada, nada el dulce, le hicimos estos cupcakes salados.
Al principio la idea no me cuadraba mucho. Pensar que te comes una magdalena y que el sabor va a ser salado, es como que mi cabeza no lo entiende. Pero no me han disgustado absolutamente nada. Es verdad que el queso de cabra en casa nos gusta un mucho, por lo que ya teníamos un punto a nuestro favor.
La receta la encontré en CanalCocina.
Probadlos en estas fiestas y dejad a los vuestros alucinados con unas magdalenas saladas..... la pinta es buena y el olorcito que quedó en la cocina, para perder el "sentio".
Ingredientes:
- 220 ml. de aceite de oliva
- 3 huevos
- 210 gr. de harina
- 100 gr. de azúcar
- 1 pizca de sal
- 60 ml. de leche
- media cebolla
- 1 rulo de queso de cabra
- 1 sobre de levadura
Preparación:
Mezclamos los huevos con el azúcar y batimos bien hasta que consigamos que la mezcla nos suba de volumen y blanqueé.
Añadimos el aceite y la leche despacio y sin dejar de batir.
Tamizamos la harina, la sal y la levadura.
Se la vamos añadiendo a la mezcla, cucharada a cucharada, hasta que consigamos que quede homogénea.
Guardamos la mezcla en el frigorífico, tapada con un trapo limpio, durante una hora aproximadamente.
Pasado este tiempo, ponemos a calentar el horno a 180º.
Mientras tanto, partimos la mitad de la cebolla en juliana.
La ponemos en una sarten con una cucharada de aceite a pochar lentamente, removiendo de vez en cuando. De esta manera iremos haciendo que los azúcares de la cebolla se vayan soltando y la caramelizaremos. Nos debe de quedar de color dorado, no hay que dejar que se tueste. Si vemos que nos quedamos sin aceite y se nos va a quemar, echamos un poco de agua y dejamos que se consuma. Escurrimos de grasa y reservamos.
Ponemos los papeles de cupcakes en el molde.
Sacamos la masa del frigorífico y la batimos unos segundos.
Partimos el rulo de cabra en aros.
Echamos un poco de masa en cada papelillo, le añadimos un aro de queso de cabra, un poco de cebolla caramelizada y volvemos a añadir otro poco de masa (sin rebasar los 3/4 de capacidad porque si no se nos sale cuando empiece a subir).
Partimos el resto de la cebolla en daditos muy finos y pequeños para que se hagan enseguida, y decoramos con ello los cupcakes.
Horneamos durante 25 - 30 minutos o hasta que estén doraditos.
